Todas las profesiones y labores tienen cierto margen de error. Sin embargo, algunas de ellas, como la medicina, requieren un actuar aún más metódico y detallado, entendiendo la responsabilidad que tiene: el bienestar de la vida de otras personas.
No obstante, en algunas ocasiones los procedimientos o recomendaciones médicas no salen como se esperaban o no se realizan con la total responsabilidad de la profesión.
Cuando el médico no actúan bajo los estándares aprobados en la profesión (ya sea por un error en el diagnóstico o tratamiento médico) y como resultado el paciente sufre consecuencias como el empeoramiento de su enfermedad, una nueva enfermedad o daños en su salud, estaríamos frente a un caso de negligencia médica.
Según un estudio realizado por los CDC (Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades) y mencionado en una publicación de la Asociación Americana de Jubilados, los errores médicos son la tercera causa de muerte en Estados Unidos, estando debajo de las enfermedades cardíacas y el cáncer. Además, el diario France 24 estimó que en nuestro país “uno de cada diez pacientes también sufre fallas en la atención médica”.
En este blog explicaremos más acerca de la negligencia médica, lo que la compone y algunos ejemplos de esta para entender cuándo es momento en que usted debe buscar a un abogado experto en caso de que le suceda.
Recuerde que si necesita ayuda legal para demandar un caso de negligencia médica puede llamar a Castan & Lecca y su primera consulta es gratuita.
¿Qué compone una negligencia médica?
Para que su caso sea considerado como negligencia médica, este debe estar compuesto de 3 factores, que son:
Lesión: Puede ser determinada como física o moral y aparecer inmediatamente o posteriormente.
Mala praxis: como explicamos al inicio del blog, esta es el desconocimiento o la no acotación de los estándares de la profesión o el protocolo sanitario requerido para el ejercicio médico, suponiendo omisión en el deber.
Nexo causal: aquí se determina que la lesión fue consecuencia de la mala praxis del médico encargado, entendiendo que el paciente fue víctima de negligencia médica.
Tipos de negligencia médica más comunes
Aunque existen muchos tipos de negligencia médica, queremos detallar a continuación los seis casos que, desde nuestra experiencia, encontramos más comunes:
Impericia: esta hace referencia a cuando el médico que lo está tratando posee poco conocimiento o habilidad para interpretar los síntomas que usted tiene y por ende no puede darle un diagnóstico o intervención terapéutica.
Para aclarar el término pericia, este hace referencia a la falta de pericia (encuentra aquí la definición de pericia según la RAE).
Imprudencia: se le llama así a la confianza excesiva del médico hacia el cuadro clínico, restándole importancia ya que cree que no existirán complicaciones relevantes, teniendo como resultado la evasión de medidas preventivas.
Error en el diagnóstico: este puede ocurrir por una falta de empleo de medios para definir el diagnóstico. Incluso puede volverse más complejo si luego de visitar en repetidas ocasiones al médico, este demora la ejecución de los exámenes, teniendo como consecuencia la pérdida de un tratamiento oportuno que hubiese curado.
Prescripción de medicamentos impertinente: se da en el momento en que el médico receta a su paciente un medicamento que no es adecuado para su enfermedad o contraindica su historia clínica. Ya que de este modo puede agravar su situación médica o incluso ser fatal.
Falta de información al paciente: hace referencia al momento en que el paciente recibirá un tratamiento médico o intervención y no se le informa correctamente sobre los riesgos, el tipo de procedimiento o las alternativas que este tiene.
Error en intervención quirúrgica: este se da cuando somos sometidos a un procedimiento quirúrgico y, a pesar de ser informado de los riesgos que este mismo tiene y los asumimos, por un error de la persona o equipo encargado de este se nos genera un daño o lesión.
Existen más tipos de negligencia médica que pueden sucederle como: errores en cirugías estéticas, infecciones intrahospitalarias, lesiones perinatales y lesiones de la madre en el parto, entre otras.
Si usted cree que tiene un caso de negligencia médica o mala praxis médica, consulte con los abogados de Castan & Lecca que le explicarán a profundidad cuál es el paso a seguir.
En caso de que usted haya sufrido lesiones personales por negligencia médica, continúe leyendo puesto que le explicaremos un poco sobre lo que puede reclamar en una demanda y recuerde siempre proceder en compañía de un abogado experto en el tema.
¿Qué puedo reclamar ante una negligencia médica?
En caso de que usted haya sido afectado por una negligencia médica, podrá reclamar con ayuda de un abogado profesional como Castan & Lecca lo siguiente:
Responsabilidad civil: en esta se enfrentará, por lo general, a los seguros y/o centros médicos privados con el objetivo de recibir una indemnización por lo ocurrido, y tendrá lugar en los tribunales que se encargan de lo civil.
Responsabilidad patrimonial: a diferencia de la responsabilidad civil, esta es la versión pública, por lo que se reclama la indemnización a la clase contenciosa-administrativa ocurridas en centros públicos.
Responsabilidad penal: en esta se reclama o solicita una multa o, en ciertos casos, penas carcelarias, con el fin de buscar la inhabilitación del facultativo el cual le prohíbe seguir ejerciendo la profesión médica.
Es importante que por medio de un abogado, usted estudie su caso y reúna toda la evidencia para determinar el tipo de negligencia médica y qué reclamará ante esta, para lograr justicia.
En nuestra web, tenemos un blog sobre cómo puede proceder para presentar un reclamo por mala praxis médica.
